En Piura, el riesgo de contraer dengue es muy elevado porque se reunieron las condiciones que la propician (agua empozada, acumulación de basura y elevadas temperaturas). En medio de la tragedia, surgió una plausible iniciativa promovida por dos docentes universitarios que elaboraron un repelente casero para aliviar la necesidad de la población golpeada por el Fenómeno El Niño.
Aurelia Zavala es una docente universitaria que aprendió la receta gracias a su abuelo y ahora que son escasos estos productos por las inundaciones, se reunió con su colega Raúl Pedregal, quien también es especialista en química. Ambos lanzaron una campaña para que más personas los ayuden a elaborar los repelentes a base de hojas de neem, hierba luisa, cáscaras de frutos cítricos (limón y naranja) y cremas humectantes para cuerpo y manos.
Preparación. La profesora Zavala explicó que árboles de neem hay en abundancia en la región norteña y tienen propiedades de insecticidas que son usadas por otros países para el control de plagas orgánicas. Para la preparación, ella aconseja hervir por cinco minutos, 20 ramas de neem, con hierba luisa, hojas cítricas y cáscaras de frutos cítricos. Luego dejarlo enfriar, retirar los ingredientes y quedarse con la composición.
Para fijar el aroma y hacerlo más agradable, se puede agregar una cucharada de crema cítrica o neutra (uña de gato o sábila). Agregar el 5% de la cantidad de agua que fue hervida. “Eso va ayudar a que se conserve y que tenga una duración de más días”, dijo.
Evitar el limón. Recomendó evitar el jugo de limón porque la mayoría de damnificados está en contacto con el sol y esto puede quemar la piel o producir manchas, por ello la importancia de haberlo reemplazado por las cáscaras de frutos cítricos, como sugerencia de su colega Pedregal.
“Cada 15 días preparo para toda mi familia, tres litros les abastece para dos semanas, el repelente de la tradición familiar. La mayoría de las personas que lo ha probado asegura que es 100% efectivo, por eso hemos decidido lanzar una campaña, si nos ayudan a preparar, tendríamos 60 litros más”, comentó.
El ingeniero Raúl Pedregal, explicó que un repelente químico, usa en su composición insecticidas que pueden ser nocivos para la salud y que en estos tiempos de emergencias, resultan ser muy caros. “Aquí tenemos en la naturaleza abundancia de neem y otras hierbas que se van mejorando con otros aditivos”, comentó.
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